de todo mi mundo, de mis secretos,
eres parte de lo que soy y lo que ansío.
mirada de lucero iluminas mi corazón,
con esos ojos llenos de sabiduría,
que para si quisiera la Diosa griega Atenea.
Eres el más dulce sueño hecho realidad,
hechicera de mi alma, dueña de mi corazón,
miro tu rostro y viajo hasta los cielos,
cierro los ojos y veo tus labios en los míos,
hay tanta belleza y perfección puesta en ti,
que para sí quisiera la Diosa nórdica Freya.
Tu cuerpo rebosante de majestuosa belleza,
tierra de ricos frutos ya dieron luz a una hija,
armonía como el aire con el pájaro en vuelo,
al contemplarlo muero y resucito de alegría,
coraje de madre eres reina de lugar fértil
que para sí quisiera la Diosa griega Afrodita.
Viste la luz entre las más hermosas flores,
dueña de un mágico corazón que enamora,
te rinden pleitesía Dioses, sabios y poetas,
inspirada por los ángeles eres mujer valiente,
dichoso el hombre que consiga tu amor,
ese que para sí quisiera la Diosa romana Venus.
Fer Ferrer
Poeta y novelista
Poema Registrado
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