"NO QUIERO SUFRIR MÁS"

Solo sé que no quiero sufrir más, Dios mío tu más que nadie sabes que jamás he hecho daño a nadie, por más daño que me hayan hecho a mí, siempre supe que llevar odio en el alma no es bueno, trato de dar lo mejor de mí, en todo, en lo personal, en lo profesional y sobre todo en lo sentimental, pero parece que nadie lo nota, nadie lo valora, cuanto más doy, mas me lastiman, directa o indirectamente, pero lo hacen. ¿Qué es lo que tengo que hacer para que esta vez todo vaya bien?, ayúdame, dame una señal, tú mas que nadie sabes de mis sentimientos, que son puros y sinceros, lo mucho que la amo, quiero que sea feliz, ayúdame a hacerla feliz. Cuando se marcho de mi vida sin darme ninguna explicación, yo la espere, y cuando volvió el cielo se abrió ante mí, dijo volver tan solo para pedirme perdón, pero yo le dije que tú Dios mío eres el único que tienes el poder de perdonar. De nuevo de las cenizas renació nuestro amor, además Dios mío tu esta vez nos has allanado mucho el camino, sé que es tu deseo que estemos juntos para siempre, a pesar de lo incomprensible que puede ser para el resto de los mortales, falta tan poco para que se cumpla el mayor de los deseos que en toda mi vida he tenido, pero tengo muchos miedos, siento que las cosas se pueden terminar. Nunca antes Dios mío y tu muy bien lo sabes he querido dar un paso tan decisivo en toda mi vida, jamás antes a ninguna otra mujer le pedí que fuera mi esposa, pero siento que ella está llena de dudas, que teme a lo que dirán todas esas gentes que no buscan su felicidad ni la mía, esas gentes que viven queriendo dictar normas y estereotipos que nada tienen que ver con tu voluntad, que por ese temor oculta sus sentimientos y me oculta a mí, que incluso en ocasiones deja de ser la mujer que en verdad es y que tu y yo conocemos la belleza que encierra en su corazón, y todo eso me hace daño y no quiero sufrir más, te ruego Dios mío que la ilumines dándole fuerzas para que nada le importe salvo nuestro amor y tu voluntad, haciéndome sentir lo más importante en su vida, demostrándome su amor, con la convicción de que nuestra relación está bendecida por ti Dios mío.