Es difícil verme enojado pues no lo veo como requisito para mostrar lo que siento, prefiero escribir un verso o igual tener un dialogo, prefiero un cigarro que mostrar ira o rencor, a mi me educó el silencio para no hacer daño y la comunicación para limar asperezas, me abrazan los libros, tengo aspecto alegre pero en realidad me gusta dejar los problemas para cuando estoy solo y los pienso. Un día decidí estar solo porque la vida es más atractiva cuando piensas que todo está perdido, nadie puede conocer sus límites cuando está seguro.
Tengo tantos recuerdos de ti convertidos en secretos, tus labios como latidos fueron veneno, tu nombre suena como melodía de piano y repito que fuiste bendita, e inspiraste demasiados escritos míos como suspiro, haciéndote inmortal en cada párrafo leído.
No eras perfecta pero supiste enamorarme, delirio y tiempo, juego y sueño, pasión y deseos, no todos los días encuentras una mujer de tan inmenso sentir. Eras mi reflejo, eras viento de inspiración, nudo en la garganta y tranquilidad después de hacer el amor, tu piel fue mi mejor lienzo, mezcla de ternura y perversión, tú no podías ser un secreto.
Pero un día te alejaste sin dar motivos, ahora dices que fue culpa mía, una excusa más o un pretexto, con sangre de mi alma, en la soledad de tu silencio, con la bondad de mi esencia, y tú no quieres que termine esta historia pero quieres continuarla a tu manera, en secreto y con muchas condiciones, con innumerables peticiones pero sin ofrecer algo distinto.
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