"SER FELIZ"

Proponte ser feliz, arranca todo pensamiento triste o negativo. Siéntete más alegre que nunca, no te lamentes de nada. Agradece a Dios un nuevo día con alegría. Trata de ajustarte a la vida, acepta al mundo como es y adáptate a él. Si sucede algo que te desagrada, no te mortifiques ni te lamentes, agradece que haya sucedido porque así se pone a prueba tu voluntad de ser feliz. Se dueño de tus nervios, de tus sentimientos, y de tus impulsos, porque para triunfar tienes que tener el dominio de ti mismo. Trabaja con alegría, con entusiasmo y pasión, haz de tu trabajo una diversión. Evita conversaciones y discusiones desagradables. No pienses en los fracasos. Si las personas a quien tienes afecto te desprecian, ofréceselas a Dios. Si comienzas a criticar a una persona, cambia la crítica por el elogio; toda persona tiene sus defectos y virtudes, así que olvida sus defectos y concéntrate en sus virtudes. Elimina la prisa y la indecisión. Vive con calma, con paciencia, porque la prisa es el enemigo de una vida feliz y triunfante. No permitas que la prisa te acose ni que la paciencia te abrume. Ten confianza en ti mismo. Haz frente a todos los problemas con decisión y valentía y no dejes ninguno para mañana. Compara tú vida con la de otros que sufren más. Trata de resolver los problemas de hoy. El futuro se resuelve a sí mismo. El destino pertenece a los que luchan. Si algo se te queda sin hacer, no te desesperes; lo harás mañana. No pienses en el pasado, no guardes rencor a nadie. Asume tus responsabilidades, y no eches a otras personas la culpa de tus problemas. Comprueba que Dios te ama y te premia. Haz el bien a alguien. ¿A quién? Quizás a ti mismo. Trata de pagar el mal con el bien, y al llegar cada noche, comprobaras que Dios te premió con un día de felicidad. Y mañana... ¡As otro día como el de hoy!