Me enamoraré como nunca imagine que lo haría, con expectativas de futuro, no buscando que me llenaras los vacíos, si no siendo completo, desde la libertad profunda de permitirte ser yo mismo, expandiéndote mi corazón. Me pediste paciencia, que te esperara, ambas cosas las he hecho hasta límites insospechados para mí. Yo sólo te pedí que me hicieras sentir tu hombre y nunca lo hiciste, que tuviéramos al menos cada semana nuestro tiempo y tú me llenaste de ausencias. Te hable de que construyeras día a día un puente, piedra a piedra en la búsqueda de un futuro juntos, nunca lo hiciste, ni una sola vez, ni un solo día. Cuando te encontré, me alegré porque me elegiste, desde la alegría de que al fin llegaste, no por huir de la soledad sino para amarte porque te considere la pareja ideal. Me equivoque regalándote una confianza que nunca te ganaste, y me traicionaste con tus mentiras y engaños, aun así te las perdone pero nunca dejaste de mentir. Me esforcé para entenderte aunque tú nunca me entendiste sólo te importaba tu egoísmo y mantener la vida de falsedad que habías creado para tu hijo y a los ojos de los demás. Si el tiempo volviera atrás no te permitiría entrar en mi vida porque me la has llenado de dolor y sufrimiento. Sólo he sido una marioneta en tus manos, embaucándome, jugando con mis sentimientos para poder darle a tu hijo lo que nunca fuiste capaz de darle tú. Pero el tiempo coloca a cada uno en su lugar y la verdad siempre acaba venciendo, es la hora de desenmascararte al mundo para que sepan quién eres en realidad.
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