con la esperanza de que llegaras con la llave para abrirlo,
los alborotas y no puedo por más tiempo contenerlos,
puedo parecer atrevido y osado por desear mostrártelos,
hace mucho que admiro tu belleza e innumerables encantos,
me tienes atrapado con esa sutil delicadeza de tu sentir.
Un día te convertiste en mis sueños, anhelo hacerlos realidad,
prodigarte en cuidados, engalanarte con ramos de flores,
llenarte de alabanzas en mis poemas susurrados a tu oído,
permíteme despertarte cada mañana con el canto de la ternura,
que nos recorra un fuego que ni los mares puedan apagar,
amémonos aunque el mundo pueda caer en mil pedazos.
Toca mi mano en una tierna caricia que me llene el alma,
provócame con el fresco aliento que de tu boca brota,
invítame a perderme en tus labios carmesí en un beso,
déjame perderme en tu mirada, en cada una de tus sonrisas,
atrápame para sentirme tuyo, solamente y únicamente tuyo,
llévame hasta allí donde estés con tu pasión desbordada.
Muero por saciar mi sed bebiendo del tierno licor de tus labios,
déjame llevarte cada noche hasta las estrellas para ver el cielo,
me siento cautivo del embrujo de tus ojos en cada mirada,
dominado y enloquecido por el lienzo que conforma tu piel,
lugar sagrado donde deseo escribir mis más sublimes poemas,
sensual ninfa y doncella te lo ruego, déjame cortejarte.
Fer Ferrer
Poeta y novelista
Poema Registrado
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