domingo, 29 de junio de 2014

"SE ENAMORO DE MÍ"

Se enamoro de mí antes de bajar del tren por primera vez. Lo sentí cuando miré el móvil y leí, de sus propias manos "¿Dónde estás?", yo me había equivocado de andén. Se enamoro de mi cuando muerta de miedo la vi pasar por mi lado vestida de rojo, fui consciente de que estaba enamorada de mi cuando toque su espalda y al volverse le mire a los ojos. Llegué 5 minutos tarde a nuestra primera cita, y me parecen pocos, teniendo en cuenta que me he pasado toda mi vida esperando que ella llegase a la mía, y no fuese en forma de sueños, porque los sueños, junto a ella, están empapados de realidad y cumplo uno cada vez que estoy con ella. Me enamoré de ella cuando en nuestra segunda cita pasamos la noche juntos, nunca imagine que nadie pudiera tener tanto amor guardado durante toda su vida y me lo entregara todo a mí en una sola noche. Me enamore de ella cuando apenas faltaban unos minutos para que amaneciera paseábamos tomados de la mano camino de la estación y no dejaba de llorar sabiendo que nos teníamos que despedir sin saber cuándo nos volveríamos a ver. Ella está llena de miedos que yo consigo disiparlos cuando estamos juntos. La amo porque es de ese tipo de poesías que suenan mejor cuando están enamoradas, aunque carezcan de todo tipo de reglas, y además está enamorada de mí. Ella no necesita ritmo porque baila en los lugares donde nadie baila, la canción la lleva dentro, y es la única que consigue que mi corazón también baile. Tiene en la piel una declaración de amor, porque cuando estamos juntos, todos sus poros son puro sentimiento. Nunca voy a olvidar la primera vez que la vi sonreír, como tampoco la primera vez que la vi morderse el labio olvidándose de que yo estaba ahí, dispuesta a robarme el corazón. Jamás intentaré escribir sobre la forma que tiene de hacer el amor, porque si yo leyera esto sin ser uno de las dos protagonistas de nuestra historia de amor, creo que moriría antes del primer acto. No sabe todas las ganas que tengo de recorrerme el mundo a través de sus ojos, viajar a su lado en esto llamado vida. Me enamoré de ella, pero eso no es extraño, lo extraño hubiese sido no hacerlo, por qué me enamoré de ella y por qué sigo haciéndolo cada día desde que entró en mi vida. Al igual que la luz de las estrellas tarda millones de años en llegar a la tierra. Algo me dice que desde hace millones de años, yo ya estaba enamorada de ella.


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