Desde que te conocí, seguramente no sabes cómo, pero yo recuerdo cada detalle, cada palabra, las que ahora no quieres que te recuerde, porque desde que sabes que contra viento y marea sigo aquí para ti, te borraste, sin importarte si me creas dudas, tienes muy bien aprendida esa lección de que no hay mejor defensa que un buen ataque.
Cuando te siento indiferente me apuñalas el corazón de la manera más cruel, dicen que hay una forma de olvidarse de un amor, obteniendo otro amor, pero como pensar en otro amor si tengo intactas las esperanzas de que estemos juntos para siempre, es imposible borrar este amor que encendiste, ya que tú fuiste la causa de este amor, solo tú eres la única que puede apagarlo con tan solo mirarme a los ojos y decirme esas tres palabras a las que les temo más que a la muerte, tres simples palabras, no te amo.
Es lo único que me tienes que decir si no te importa, para facilitarte y facilitarme las cosas, pero no puedo ir a decirte que me digas que no me amas, porque de tan solo imaginar tus palabras se me llenarían los ojos de lágrimas, se me destrozaría el alma y mi vida ya no tendría ningún sentido, sería un muerto en vida con las ilusiones y el corazón extinguido.
Solo me queda decirte que nunca amé como te amo, que te amo a tal punto, que vivo recordándote cada instante de mi existencia…
Tan solo espero que me comprendas algún día, que comprendas a este amor un poco loco y masoquista, pero que si se le diera la oportunidad de hacerte feliz no te arrepentirías, y simplemente me queda decir todo lo que siento en las dos palabras más simples, dulces y sinceras del Universo, esas palabras que dicen todo, y que para mi reflejan tu imagen, tu voz, tu mirada, tu persona, esas simples palabras que dicen...
TE AMO
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