Tú que no puedes compartir tus días conmigo, que no puedes besarme, que no puedes tocarme, que no estás cuando más te necesito, que no puedes verme llorar en las noches, que no puedo ver lo que haces durante el día, que sólo me regalabas unas pocas horas a la semana y ahora no puedes regalarme ni cinco minutos de tu tiempo, que no tengo la certeza de que vas a hacer conmigo, que a lo mejor eres prohibida para siempre. ¿Por qué hiciste que mi corazón te amara?
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