Hay cientos de cosas que no se, lo único que puedo asegurar es que la amo, no como amas un atardecer o ver el mar. La amo de pies a cabeza, desde su lado más amargo hasta el más dulce, desde sus virtudes hasta sus defectos, así la amo, completa, no por un tiempo, desde aquel doce de abril hasta el fin de los tiempos, todas mis emociones, todos los versos, todas las noches en vela y las mañanas donde siento nostalgia de no sentirla en mi cama, las conversaciones sin sentido e inclusive las lagrimas derramadas, han sido un largo camino que sin duda recorrería otra vez, para llegar a la misma conclusión……… la amo hasta los huesos porque ella es mi todo.
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