Prometo que mi corazón es el culpable de todo lo que escribo. Un siete de abril mi ser se topo con ella, con el amor de mi vida, y mi vida se convirtió en un cuento de pasión. Cada signo de puntuación marcan los días en los que vivir sin tenerla a mi lado se hacen interminables, marcan el verbo amarla locamente, sinónimo de vivir. Escribir es un laberinto de pensamientos, donde mis experiencias narran cada capítulo de nuestra historia. Prometo que mi mayor deseo es que cuando no estoy con ella mis escritos y poemas toquen su corazón.
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