Sé que no ver las respuestas de Dios a nuestras plegarias nos lleva a la desesperación. Sé que tu estas pasando por un momento de esos, en donde estas siendo presa de la desesperación, los días han pasado, los meses ya se fueron, ¿Y tu respuesta?, ¿Cuánto tiempo has de esperar más?
Personalmente Dios me las ha dado muchas veces, hoy en día puedo decir con toda autoridad de que no me es difícil esperar las respuestas. Claro está que quisiera que muchas de ellas se cumplieran ahora mismo o a lo más tardar mañana, pero he comprendido que aunque me desespere, eso no traerá la respuesta de Dios, pues él tiene un tiempo estipulado para darla.
Y es que es fácil quererse desesperar, mas cuando lo que deseas no quiere ni asomarse en lo más mínimo, es que lejos de verse cumplido ese deseo se ve más lejos que nunca, pero tranquila llegara.
Te pondré un ejemplo: en mi vida he tenido momentos en donde llegue a pensar que nunca se verían cumplidas mis plegarias a Dios, deseaba que llegaras a mi vida y llegaste cuando ya no te esperaba, en mas de alguna vez me pregunte del porque yo no podía disfrutar de lo que tanto anhelaba, el amor, amar y sentirme amado por la persona que amara, no llegabas y en alguna ocasión quizá hasta me desespere. Pero Dios después de casi una vida me ha enseñado a saber esperar su momento.
Dios escucha tus plegarias aunque no se cumplan rápido, pero al final se terminaran cumpliendo, tarde o temprano llegaran.
Cuando se tiene la confianza necesaria para saber que si no es ahora, podrá ser mañana y si no, habrá más tiempo para poderlas recibir, pero de que las recibes, las recibes.
Dios actúa en un tiempo muy diferente al nuestro, no quieras medir las respuestas de Dios por tu tiempo, mídelas y asimílalas en el tiempo de Dios, pues él las da cuando cree que es el momento perfecto.
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