No lo supe hasta que me quede encadenado por tu amor, que nota de tu música, o coma de tus palabras me llenaron, si nunca llegue a mirarte, ni tan siquiera, supe de ti, cuando te mire a los ojos, comprendí que nunca dudaste ni tampoco me olvidarías, yo que a cabo de conocer tu existencia, reconozco sorprendido, lo que significa el sacrificio al silencio, en la sombra admirabas calladamente, como apenas te dedicaba unas frases, que para ti eran música celestial, las palabras del cielo, cuando caían enfrente de ti, contenías la respiración, recorrían todo tu cuerpo, tus pisadas dejaban huella en las lágrimas vertidas, por ignorar que sería de ti sin mí, bien ahora que me tienes enfrente, dime, abre tu corazón, deja que fluyan los sentimientos, no amarres tu pasión, deja que vuele con el viento, llegará a mí con toda la libertad, te juro con sinceridad y lealtad, háblame y cuéntame, mis ojos estarán atentos como la puerta de mi corazón a las notas de tu música, Atrévete.
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