Hallamos la felicidad cuando estamos juntos, cuando nos tocamos y rozamos enloquecidamente, en las caricias afectuosas que nos regalamos, en las miradas seductoras. Nos derretimos de emoción con besos fogosos, con nuestras lenguas ardientes y nuestros excitados suspiros. No hay forma de separarnos, tú dominas mis sentidos y yo los tuyos, tú tienes mi mente hechizada. Nuestros corazones consintieron este amor, dijimos sí a la locura y ahora nos encontramos en un mar de placer incontenible. Nos regalamos nuestros cuerpos, mente y alma, tú eres la dueña de mi reino. Perdemos la razón amándonos y fundimos nuestros espíritus. Espiramos elegancia, inspiramos amor y suspiramos en silencio un lindo dulzor. Nos adoramos, y disfrutamos de nuestro fulgor. Somos almas inseparables, existe fiel vinculación y nuestra existencia es toda una atracción. Somos libres para amarnos, porque nadie es dueño de nuestros corazones y sentir, y eso es todo lo que cuenta.
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