Quisiera que siempre tengas las mismas ganas de amarme, que después de hacer el amor, quisiera por esta última vez que este cariño borre todas tus cicatrices, de verdad quiero amarte hasta morirme. No se trata de tener tu cuerpo, es la tranquilidad de tu pensamiento, no sólo deseo tu sexo, es la forma en que miras mi alma y comprendes mis intenciones. No podría perderte porque sinceramente no me perteneces, pero así puedo amarte, sin atarte, con la distancia exacta para cuidarte, no necesito poseerte para saberte, no necesito tus besos ardientes, ni tu cuerpo de tentación para sentir que me ames, me basta con tus ojos buscando razones para no perderme, tu abrazo fuerte y la memoria de nuestras acciones. No necesito que seas vicio, yo no tengo que ser juramento, no eres perfecta pero tampoco pierdes intento, no soy el mejor pero me haces enorme de corazón, tal vez no seamos para la eternidad pero siento que te amo, porque aunque queden ruinas de mi universo tu te quedas tras de mi esperando que siga luchando, porque cuando caigo te sientas a mi lado y es el escalón dónde me levanto, porque eres una mujer que no tiene razón para amarme pero me tienes en ti como sangre. Hagamos el amor otra vez, no tengas miedo de abrazarme, quédate porque quieres, porque puedes soportar los errores, perdonar las virtudes y porque puedes complementarte. No dudes que esta vez puedes quedarte, te prometo que haremos el amor cada noche, te amare y veras que todo puede ser un tanto diferente, dejemos el ayer en situaciones, sin reproches y seamos consecuentes en cuanto a las breves pasiones.
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